Estampas

5410

Martes, 29 de agosto de 2023

“Llueve cerrado, como si la lluvia estuviera dentro de un cubículo y no pudiera salir. Cuántas veces llegué a casa bajo una lluvia así en la madrugada y fui a la cocina y busqué un pedazo de pan viejo en la bolsa y le quité con un cuchillo el moho verde y lo tosté en el reverbero y le puse un poco de azúcar por encima y cené en silencio, empapado. La Gran Revolución nos había liberado también de los paraguas, sí. Y después me sequé con el trapo que hacía de toalla y antes de acostarme estuve un rato mirando al niño dormir. Tendré que hacer alguna vez la historia de la cuna. Ya sé que la lluvia no es la misma lo que pasa siempre pasa definitivamente pero lo parece. Y después me pegaba a su cuerpo joven y tibio y afuera la lluvia en su cubículo y yo en la gigantesca prisión me dormía”.

Sigo revisando el tercer volumen de mis emanaciones.

5409

Lunes, 28 de agosto de 2023

Hay muchos escritores con talento (sea eso lo que sea) y algunos con mucho talento. Pero eso nunca ha sido suficiente.

5408

Domingo, 27 de agosto de 2023

Hace poco fuimos a cenar al Gresca. Ya no volveré al Gresca. En el Gresca siempre han sido miserables con las porciones pero ya la cosa pasa de castaño oscuro, que decía mi madre. Ahora al Gresca se va y se paga (carísimo) por no cenar. Como culminación de las escasas muestras pedimos un pescado de nombre horrísono. Nos trajeron un alevín, poco para una persona, no digamos para tres. Llamamos la atención a la chica, muy amable, acerca del tamaño minúsculo del pececillo y dijo sí sí se lo comento a nosequién (el Chef, supongo) pero eso no varió ni un centavo el precio del pececillo. Como a estas alturas el hambre apretaba y sólo sobrevivíamos gracias al pan con tomate que no paraban de traer (un viejo truco), pedimos cordero. Ese fue el mayor error de la noche. Yo tenía fresco en la memoria el fabuloso lechazo asado de Castilla del Convento de Mave y ante aquellos trocitos esmirriados (a mí me pareció carne de mono) me dije, nunca más. Y por añadidura un ruido espantoso que impedía conversar y un calor atroz. Adiós, adiós.

5407

Sábado, 26 de agosto de 2023

Siempre digo que todo lo que escribo es de reír en el sentido de que la vida es tan caótica y absurda que al fondo de todo siempre se puede escuchar una carcajada atroz.

5406

Viernes, 25 de agosto de 2023

Es conocida la repulsión que le producen a mi querido Espada los perros. Hace poco escribió al respecto: “La felicidad de ir a cenar a una casa en el campo con la certeza de que una cochinada de perros no te saldrá a recibir junto a los anfitriones, vociferando, lamiéndote y ensuciándote el níveo pantalón con sus patazas untadas en excrementos. Y la agradable sospecha de que los ricos han empezado a dejar de lado a los animalitos, lo que es una razón más para tratarlos”.

Discrepo. A mí si no me salen a recibir perros cuando visito (raramente, ay, nunca me invitan) una casa de campo de gente rica, asumo que los anfitriones son unos cagacaviar y unos mamalonazos. Y lo primero que hago es lavarme bien las manos después de saludarlos, ese tipo de gente se pasa la vida haciéndose pajas por todas partes y por los más peregrinos motivos, sin asearse a continuación. Qué asco.

Por otro lado, que nadie crea que soy un amante incondicional de los animales. A veces pienso que la desanimalización del planeta es una buena idea, eso sí, siempre que comience el exterminio por el chimpancé humano.


Una bomba de relojería

5405

Jueves, 24 de agosto de 2023

Llevo a Petufo al veterinario. Maúlla lastimero. Ha estado así toda la noche. Cuesta meterlo en el transportín. Es el mismo en que llevé a Misu a morir. Otra vez, pienso. Y meneo la cabeza. Un perro gime cerca, es un sonido desolado, qué le estarán haciendo, me digo. Petufo se pone nervioso al oír los gemidos del perro y se refugia en el transportín donde tanto costó meterlo. Jadea como si le costara respirar. El veterinario lo examina pero no le encuentra nada me dice que puede ser por el calor. Le receta un difusor, que, se supone, tiene efectos tranquilizantes. Pago. Salimos. Cuando llego a casa, después de liberar a Petufo, voy hasta el librero donde guardo las cenizas de Misu. Y me quedo de pie ante mi niño amarillo un rato.

5404

Miércoles, 23 de agosto de 2023

Yo siempre he vivido en el matriarcado. La gran mayoría de los hombres que he conocido han pasado del dominio materno al dominio de la esposa. Y no lo han hecho a regañadientes. Los hombres desean ser controlados por las mujeres. A la sombra de las mujeres se vive mejor.

5403

Martes, 22 de agosto de 2023

Cada día que pasa me gusta más escribir y me interesa menos la literatura.

5402

Lunes, 21 de agosto de 2023

Hace unos días titulé Putos chinos una de mis emanaciones, al ponerla en FB. En cuestión de segundos me cancelaron la publicación, ya no se puede escribir putos chinos. Sé que la mayoría se deja domesticar y no tiene ni idea de lo que significa la libertad de expresión ni de lo que significa ser libre y aceptan censurarse y dejar de escribir putos chinos. Pero yo seguiré escribiendo putos chinos. Porque en un mundo donde ya no se pueda escribir putos chinos, un chino no podrá escribir putos cubanos. Y yo en un mundo donde un chino no pueda escribir putos cubanos no quiero vivir.

5401

Domingo, 20 de agosto de 2023

El test del virus chino, negativo. Gracias a todos los que me han escrito deseándome una pronta recuperación. Y, trabajando en mi tercer volumen, encuentro esta joya de 2018 veintisiete de enero; ya conocen ustedes mi proverbial humildad.

“Ayer llovió todo el día y, no sé ustedes, pero los días así yo creo que a uno deberían chupársela (al despertar con toda seguridad y por la tarde después del té o al caer la noche no estoy seguro, bueno, mejor al caer la noche, la noche siempre tiene un deje mortal y la mamada lo contrarresta mejor que cualquier otra cosa, que yo sepa). Se hace difícil vivir estos días y mientras más viejo más difícil sin esas mamadas las mamadas espantan la muerte quién no lo sabe. Llovió todo el día y no salió el sol ni un segundo y me dijo Martica mirando el cielo no sé cómo esa gente puede vivir así, y yo sabía que se refería a la gente de países como Bélgica (si es que Bélgica es un país) o Suecia o Dinamarca o Noruega o Alemania o hasta la misma Francia no crean lo que dicen de Francia un clima espantoso (excepto el sur a veces) y encima está llena de franceses. Por eso se suicidan tanto dije yo y hacen bien quién puede vivir en un lugar donde siempre llueve y aquel cielo gris (el cielo de aquí sabe que mañana saldrá el sol, pero el de allá no) y además un frío horrible en los países fríos los seres humanos ya nacen tarados, véase los rusos. Dos mamadas esa es mi recomendación para los días lluviosos y grises, pero si pueden ser tres mejor”.


La luz de España

« Anteriores Más recientes »

Comentarios

© Juan Abreu, 2006-2019