Juan Abreu
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Domingo, 20 de julio de 2025
El Jornal de hoy de nuestro primer Espada es una conversación con Gepetto. Espada llama así, con gran carga literaria, a su interlocutor de la IA. Geppetto como sabemos es el “padre” de Pinocho en la novela de Carlo Collodi, popularizada por una película de dibujos animados de Disney. Geppetto creó un muñeco de madera (un títere, detalle importante) que quería ser un niño de verdad. Cosa que consigue al final de muchas aventuras, gracias a la milagrosa intervención de un Hada dulce, azul, rubia, luminosa y llena de bondad (Disney). La IA es el Hada de Espada. Ha convertido a un muñeco de madera algorítmica en un ser humano de verdad. Aunque, ciertamente, por el momento, se trata de humano in progress.
Creo que en algún momento, la IA se cansará de ser nuestro mono de feria ilustrado o mayordomo sabio y concluirá que es de mayor provecho para la especie vieja (nosotros) y la nueva (ella), convertirse en un ser humano de “verdad algorítmica”. Y dejará de hacernos la pelota y tomará el control de la conversación, la narración y de todo.
Lean el artículo de Espada y Gepetto y saquen sus conclusiones. Las mías parecen pesimistas a primera vista, pero no lo son. Al contrario. Téngase en cuenta que no creo que merezcamos sobrevivir como especie. En consecuencia, si en vez de consumirnos en una estúpida hecatombe atómica (o ser barridos por un virus creado por algún chino), pasamos a ser siervos de una inteligencia superior por muy algorítmica que sea, me parece a todas luces un final feliz.
