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Sábado, 5 de septiembre de 2020

A cierta edad yo al menos se comienza a pensar en todas las mujeres con las que nos hubiera gustado follar. Y no pudo ser. Por muchos motivos. Hablo de personas conocidas no de fantasías. Entre esas mujeres casi todas mis amigas y amigas de mi mujer y mujeres de mis amigos, es lo más normal del mundo. A veces tienes ganas de follar con una de estas mujeres y después se te pasa, pero no en todos los casos. Hay mujeres y mujeres. Ninguna como la tuya, obviamente, a la que tienes ganas de follarte siempre si no tienes ganas de follarte siempre a tu mujer aunque lleves veinte años viviendo con ella, es que algo falla. Pero hay ganas que van y vienen y vuelven y perduran son casos señeros (qué palabro) mencionaré el caso de mi amiga Zoé Valdés. Con más o menos ganas desde que la conocí me hubiera gustado follar con Zoé. Por muchos años mientras estuvo casada era imposible porque con las mujeres de los amigos sólo puede follarse si los amigos están de acuerdo. Y después, porque la vida no es nunca como debería ser. Qué pena morirse sin follar con todas las mujeres con las que nos hubiera gustado follar. ¿No?

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