4401

Viernes, 28 de agosto de 2020

Leo el Gargantúa. Cuántas delicias cuántas furias qué mayestático desparpajo qué meadas gloriosas qué imaginación qué reino de la santa hipérbole no en balde Reinaldo adoraba este libro.

¡Alejaos de nuestros campos!

No entréis aquí, hipócritas, gazmoños todos,
viejos camanduleros, taimados, hinchados,
retorcidos, más tontos que los godos
y ostrogodos, precursores de los demagogos,
miserables mojigatos, soplones acomodados,
bribones arropados, incendiarios de altercados,
ridículos, fatuos, mendicantes, gorrones,
largaos a otra parte a vender vuestros errores.

Vuestros errores tantos
llenarían mis campos
de maldad.
Y, por falsedad,
turbarían mis cantos
vuestros errores tantos.

Comentarios

© Juan Abreu, 2006-2019