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Sábado, 30 de diciembre de 2017
Ayer mi gato negro, también tengo uno amarillo, no durmió en el closet donde acostumbra. Andará por el jardín, habrá dormido en las sillas de la terraza, me dije. Empecé a preocuparme sin embargo cuando me preparaba el desayuno y el amarillo vino a por su comida y el negro no. Pero. Poco después apareció renqueando siempre renquea tiene un defecto óseo de nacimiento en la pata trasera o eso dijo la veterinaria. Sentí alivio, y lo regañé un poco. Y entonces llegó la más pequeña de las abreus pequeñas aferrada a su blanket y empezó a acariciar al gato negro y todo volvió a la normalidad aunque a una normalidad mejorada ahora que lo pienso.
