Juan Abreu
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Hoy seis de abril amanezco con el pito más largo, creo. Déjenme medir. Efectivamente: tres centímetros más. Santocielo. Será por el día que es. Hace tiempo que no me crecía el pito me ha pasado en la vida ya varias veces terminaré con una trompa de elefante. Tengo que ser el único hombre en el mundo al que le sigue creciendo el pito ¡y el día en que cumple sesenta y cinco años! Siempre he sabido que no soy normal pero es un gran placer no ser normal de esta manera. Tomen nota las interesadas (y hasta los interesados ¡la libertad es el bien supremo!): mi hermoso pito ¡mi mejor cerebro! sigue funcionando no como antes es verdad pero razonablemente bien y ahora ¡tres centímetros más!
La vejez, dicen. Pero a mí me va siendo un crecimiento.
