3078
El algún lugar bastante lejano en Argentina sobre alguna mesa y entre amigos está mi libro. Trabajé muchos años en él era un material muy delicado: mi vida y la vida de la familia sobre todo mi madre es un libro sobre mi madre fundamentalmente. Yo no pensaba escribir ese libro. Pero. Una gran dama a la que amo la mujer más bella que existe y ha existido nunca cuando yo le contaba anécdotas de mi infancia y juventud, cosas que viví en la isla pavorosa, me decía y era muy insistente y persuasiva en esos momentos: tienes que escribirlo. Y esto pasaba una y otra vez porque son muchas las anécdotas (que ahora están en el libro) y un buen día un día magnífico escribí las primeras páginas del libro aquellas en que mi madre sale a la calle, desafiante. Y después todo fue bastante fácil, es un decir, recordaba y escribía y el Universo iba tomando cuerpo y sentido que es la sensación que tengo cuando escribo un libro.
Hace poco leí una entrevista con un escritor de diarios y memorias que afirma que novela lo vivido pero que no es ficción que son los hechos, hasta el título, lo suyo. Pamplinas. Digo esto para dejar claro aquí que mi libro es ficción sólo en la medida en que la memoria misma es ficción, pero que todo lo que digo en sus páginas pasó, son los hechos, y mi libro, definitivamente, es un libro de memorias no una novela.
