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Domingo, 15 de septiembre de 2019

Anoche volvió a iluminarse el olivo y la noche fue ahuyentada. Comenzó la barcelonesa temporada cultural en el mítico Jardín no se dejen engañar aquí es donde comienza cada año la temporada cultural. La diva Jacas presentó un espectáculo untuoso y algo triste como debe ser no hay arte de la alegría todo arte de la alegría es en el fondo frívolo y cascabelero. Cantó Jacas actuó Jacas y ella y su personaje o su personaje y ella hicieron que el público lucido y lúcido y selecto se emocionara y riera y hasta alguna lágrima caería quién sabe (de lo verdaderamente importante y veraz tenemos la ilusión falsa de saber, pero no). Los muchachos del Coure se encargaron de la cena y de los vinos y champanes y terminado el acto de magia cantamos y bailamos hasta rozar el amanecer. Yo observaba nuestra felicidad desde un rincón y pensaba en la mujer que comenzó aquí mismo a bailar y representar como divertimento hace algunos años y fue saliendo de sí misma y poco a poco refulgiendo y si me preguntaran qué es lo más impresionante de Pat Jacas diría sus canciones se está tardando en grabar estas canciones de niña crucial y de vestal acompasada, en eso pensaba anoche en el mítico Jardín bajo la noche ahuyentada.

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© Juan Abreu, 2006-2019