Juan Abreu
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Lunes, 12 de noviembre de 2018
Tengo una gorra que compré en Jerusalén y me gusta mucho y me la pongo bastante y dice delante ISRAEL. Si vieran las miradas que me echan algunos cuando saco a pasear los perritos o voy al pueblo a comprar algo y llevo puesta mi gorra. Cualquier día me tiran por unas escaleras y me rompen la cabeza las Brigadas de Respuesta Rápida del golpismo. ¿Soy yo el único que ve las conexiones y las similitudes entre las estructuras represivas castristas y las estructuras represivas de los golpistas catalano-podemitas? Todo se va cubanizando a mi alrededor. Si yo fuera la policía española no le perdería pie ni pisada, como se dice, a los esbirros y espías de la Embajada Cubana en Madrid y de su letrina anexa en Barcelona. Todo huele a castrismo y a gran operación del DGI (Sección 5) cubano, cada vez más. Después no digan que no se los advertí.
