3136

Pérez Reverte, ¿oportunista? (1)

Y en el mismo capítulo dedicado a la Inquisición Roca Barea se ocupa de los alatristes del escritor Pérez Reverte, y no sale bien parado Pérez Reverte. A mí, que conste, me gustan los alatristes de Reverte, son un estupendo entretenimiento, creo. Pero. ¿Es falta de seriedad, ignorancia u oportunismo lo de Pérez Reverte cuando se apunta al tópico de la España demoniaca?

“Para alguien que proclama con orgullo que tiene sus lecturas, no resulta fácil justificar el haberse unido tan oportunamente a la procesión, ya vieja y demasiado concurrida, de los cultivadores de la historia-literatura de España como guarida del demonio. O bien fallan las lecturas o bien interesa participar en el auto de fe perpetuo y siempre exitoso que es la leyenda negra. No es descabellado suponer que una parte del éxito de Pérez Reverte, dentro y fuera, se debe a que recrea con vigor y convicción los tópicos hispanófobos del protestantismo, de la Ilustración y, luego, del liberalismo. Ese país podrido, corrupto y fanático que Pérez Reverte describe en sus novelas es una vieja melodía cuya reiteración suena muy bien a muchos oídos por razones distintas; razones viejas pero no muertas. El inquisidor de Reverte se parece al de Schiller, al de Dostoiesvski, y al pavoroso Jorge de Burgos de Umberto Eco, como una gota de agua a otra”.

Y lo más interesante es que todos esos inquisidores son falsos. Y sobre todo es falso el presidente del Santo Oficio que describe Pérez Reverte en sus alatristes.

Comentarios

© Juan Abreu, 2006-2019