Juan Abreu
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Desde hace algunos años, dedico gran parte de mi tiempo a pintar retratos de cubanos fusilados por la dictadura de los Castro. Los Castro llevan más de medio siglo matando cubanos. El año 1959 fue el año en que comenzó la matanza. De ahí que ese sea el título de mi proyecto homenaje a los fusilados por los Castro. Todos esos fusilamientos, sin excepción, pueden considerarse, y así lo considero yo, crímenes políticos, puesto que ningún acusado (en los casos en que hubo juico) disfrutó de garantías legales: en Cuba no hay justicia independiente sólo justicia revolucionaria y justicia fidelista, lo que quiere decir que no hay justicia.
Durante más de medio siglo un gran silencio ha gravitado sobre estos crímenes. Ahora, gracias a la iniciativa de la eurodiputada Teresa Giménez Barbat, los rostros de los fusilados por los Castro se exhibirán en la sede del Parlamento Europeo en Bruselas. En Europa, según mi experiencia, no importa mucho la suerte de los cubanos esclavizados por los Castro, ni la memoria de sus víctimas. Por eso, los cubanos libres debemos estar especialmente agradecidos por esta muestra de solidaridad y de humanidad y hasta de decencia política, de parte de la eurodiputada Barbat y de sus colegas, que han hecho posible este homenaje a las víctimas de la dictadura castrista.
En nombre de los cubanos libres, gracias.
