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Sábado, 29 de septiembre de 2018

Hace poco salió Aznar sin bigote y discutió con Rufián e Iglesias y cómo se puso el aznarismo. Yo me reí bastante. De pronto Aznar, héroe. Bueno. Tampoco hay que exagerar. Rufián e Iglesias son poca cosa como contrincantes y, además, Aznar no tiene moral para erigirse en defensor de los españoles libres e iguales. Aznar fue uno de los grandes negociantes (Pacto del Majestic) de la soberanía española con los ahora golpistas y entonces golpìstas work in progress catalanes. El golpe catalán y la rebelión catalana y el brote de racismo que ha hecho erupción en Cataluña es en gran medida producto de las políticas cobardes y oportunistas de Aznar. Ya a la gente se le ha olvidado que hablaba catalán en la intimidad, a mí no. Siempre me pregunté ¿por qué coño tiene que congraciarse tan ridículamente un presidente de España con un demagogo autoritario tribal grosero y de provincias como Pujol? Aznar desmanteló (Vidal-Quadras) la oposición democrática al bandolero Pujol y bendijo la inmersión lingüística en Cataluña. ¿Aznar? Si Aznar es el nuevo adalid de los ciudadanos libres e iguales de España ante el golpismo catalán, España está acabada.

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© Juan Abreu, 2006-2019