1985

Veo The Imitation Game. La película bien y siempre es un placer ver a Cumberbatch. Pero. Lo que le hicieron a Turing, por maricón. Uno de los hombres más brillantes que ha producido la especie, humillado, medicado y castrado químicamente, por maricón.

Dicen que Turing se suicidó (o lo suicidaron), comiéndose (o haciéndole comer) una manzana con cianuro. También dicen que su muerte fue accidental. Da igual. Lo que le hicieron a Turing, por maricón, es lo que me interesa. Cómo lo aniquilaron por maricón, a fin de cuentas.

También me interesa mucho lo del indulto o perdón concedido a Turing, en 2013, por la Reina de Inglaterra Isabel II. Sí. La Reina perdonó al maricón. Seamos magnánimos, perdonemos al maricón. Sí, sí, la Gran Inglaterra y su Reina perdonan al maricón.

No hay ninguna aristocracia que no sea la de la inteligencia y la del talento, es decir la aristocracia que tenía Turing, al que Inglaterra humilló y aniquiló. Por maricón. Pero. La Reina perdona al maricón. Uno pensaría que es Turing quien debe perdonar a la Reina Isabel II y a Inglaterra. Pero no. La Reina es quien lo perdona por maricón indecente y suicida. ¿Demencial, no?

La Reina de Inglaterra, que no ha visto una polla (no digamos ya en su culo, en ninguna parte) desde hace siglos, perdona a Turing. ¿A qué se debe esta indecente decisión? Miro un retrato de la Reina Isabel II tratando de descifrar el enigma. La miro un par de minutos, más no se puede ¿Quién puede resistir más de dos minutos esa cara de Vieja Bruja y esa cara de yegua desesperada por ver una polla que tiene la Reina?

No yo, naturalmente.

¿Por qué la yegua falta de polla Isabel II de Inglaterra cree que puede perdonar a Turing?

Han pasado casi veinticuatro horas desde que salí del cine y no puedo quitarme esa pregunta de la cabeza.

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